Viste las paredes de tu casa con pintura decorativa.

Un aspecto importantísimo en la decoración de interiores es la pintura que escojamos para nuestras paredes. Existen multitud de técnicas según el acabado y estilo que queramos darle a cada estancia. Una vez escogida la pintura, colores y ténnicas a utilizar, deberemos preparar la superficie para obtener los mejores resultados. Quitaremos las impurezas con una espátula y repararemos los posibles agujeros o grietas que tuviera con yeso o masillas especiales, fáciles de preparar y de secado rápido. Se eliminarán con agua y jabón las posibles manchas de humedad que existieran en las paredes para evitar posibles apariciones una vez realizado los trabajos de pintura. Después lijaremos la zona hasta


Una vez lista las paredes y escogidos los colores y técnicas a usar, podemos empezar a pintar. A parte de las técnicas ya conocidas como el gotelé, el lacado o la pintura a brocha, podemos destacar:


- Pintura con acabado estucado:esta técnica intenta imitar un acabado similar al mármol. Sus orígenes datan de la civilización minoica. Siglos despúes fue imitada por Roma hasta nuestros tiempos. El famoso estucado veneciano se utilizó en casas de familias adineras y/o en muros de palacios debido a su gran resistencia a los agentes externos.

- Pintura con acabado esponjado: esta técnica se aplica dando golpecitos con una esponja humedecida con la pintura que queremos aplicar. Se logra profundidad y volumen. En primer lugar se aplica una pintura al agua que se deja secar unas 3 horas. En un segundo momento se aplica otra pintura, con la esponja bien escurrida y se repasan las imperfecciones.

- Pintura con acabado aguado o pintura lavada:para realizar esta técnica la mezcla debe llevar la misma proporción de agua que de pintura, para así obtener poca consistencia. Este trabajo de pintura es de los más fáciles de aplicar y que menos esfuerzo acarrean.

- Técnica cuarteado o craqueado: intenta recrear la apariencia de la de una pared vieja llena de elegancia. Crea diversas grietas en la superficie, similar a la porcelana fina envejecida. La base de pintura inicial debe ser de un color claro y dejarse secar unas horas. En una segunda mano se aplica la exterior de color más oscuro y se dejan transcurrir unas horas. Posteriormente se aplica la resincola, un pegante de secado rápido de carpintería, y se seca con un secador para que haga el deseado efecto agrietado en nuestras paredes.

- Técnica del estarcido o esténcil: requiere de la utilización de plantillas recortadas o moldes para plasmar motivos decorativos. En el mercado existen multitud de plastillas listas para utilizar. Es muy importante fijarla bien. La pintura se puede aplicar con pincel o con esponja según el acabado que busquemos. Evitaremos que gotee la pintura bajo la plantilla escurriendo bien el pincel y dando pequeños golpecitos sobre ella. Así dotaremos a nuestra pared de una personalidad propia y de detalles que recreen ambientes.

¿Y tú que otras técnicas de pintura conoces?

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